Dios es amor

Dios es amor, Y el hombre también es amor, porque está hecho a su imagen y semejanza.Hemos sido creados para amar. Y por eso debemos amar a los otros como a nosotros mismo, entregarnos totalmente al amor y permitir que su corriente corra a través de nosotros, ser transmisores del amor.

El amor de Dios nos rodea por todas partes. Su amor es el agua que bebemos y el aire que respiramos y la luz que miramos. Todos los fenómenos naturales no son sino diversas formas materiales del amor de Dios. Nos movemos dentro de su amor como el pez en el agua. Y estamos tan cerca de Él, tan embestidos en su amor y sus dones que no nos damos cuenta de ello. Los hombres caminan en las calles a prisa y llenos de preocupaciones, si detenerse un momento para pensar en Él y para sentir que en el nos movemos.

Dios se refleja en la soledad y la paz, como el cielo en el lago en calma. Y deje que el agua se aquiete y se purifique para que en su superficie se refleje el rostro de Dios y por eso se retira uno a la soledad y el silencio.

La razón por la cual la gente no suele experimentar la presencia de Dios es porque estamos acostumbrados a que toda experiencia a nos venga de afuera, y esta experiencia es de dentro.

Cuando miras la vastedad del universo en una noche estrellada, nuestras galaxias son trescientos mil millones de estrellas, no debes sentir tu pequeñez ni insignificancia, sino tu grandeza. El espíritu del hombrees mucho más grande que estos universos porque puede mirarlos y comprenderlos y es consiente de ello, mientras que en esos mundos no pueden comprender al hombre. Y cuando el enamorado dice que los ojos de su amada brillan más que las estrellas, no están exagerando, porque en los ojos amados se vislumbra la luz de la inteligencia y del amor.

Ernesto Cardenal